GUZMAN1

sábado, 11 de febrero de 2017

"La bomba silenciosa", de FABRICIO ESTRADA.


Y es ahora,
que como un grito de alarma aérea
el pregón de las tortillas
despierta a un día que no avizora nada bueno.

Los edificios, mendigan un poco de ruina
y los autos, simplemente, se desploman
ebrios de plomo.

Los afiches políticos crecieron por la noche,
plaga de sonrisas a la que es tan fácil
escupirles el rostro.
Ninguna bomba cae,
pero en la gente, se ve la asfixia del bunker,
una mirada que escarba el silencio
y que luego se pierde con la rotación del cielo.

En las vitrinas, los orates 
van tejiendo a punta de piedra
las bellas telarañas del miedo.

F.E.