A ver cuando el Presidente ornamental que tenemos da alguna explicación, aunque ya nadie le cree ni dentro ni fuera de España.
Y es que desde el principio solamente se han ocupado de buscar la forma de trincar, repitiendo la cantinela de la herencia recibida. Cómo si el PP no estuviera haciendo lo mismo que sus predecesores. El ideario liberal lo guardan para el pregón.
La lumbrera de España. El gran estadista que ha logrado darle a Merkel el timo del tocomocho para prorrogar el endeudamiento agónico de una economía basada en el paro encubierto (que ahora llaman "política de crecimiento").
Ya veremos qué les dicen cuando se acabe el dinero y vuelvan a pedir más.
Dentro de poco el crédito comenzará a fluir a las empresas contratistas, mientras las consabidas comisiones irán a parar a las entidades sin ánimo de lucro donde los que mandan harán el reparto del botín. Y nos dirán lo bueno que es que a ellos les vaya bien para infundirnos "confianza".
Menuda sorpresa se va a llevar las próximas elecciones, cuando dejen el panorama que todos los observadores imparciales ven venir.
Una pantomima ridícula para ocultar a la gente que en este país de mamarrachos no se cumple ninguna ley, ni por los políticos ni por los magistrados que manejan los hilos en las altas instancias.
Eso ha sido así siempre en esta farsa de Estado de Derecho que es en realidad todo lo contrario.
Los problemas de la vivienda cada vez peor, y lo mismo con el paro, porque ni han bajado los impuestos como prometieron, ni han hecho ABSOLUTAMENTE NADA por mejorar la economía, o los servicios públicos.
Cuando se les pregunta cuál es su solución, no responden. Y cuando se les exigen soluciones, a pedir prestado y a gastar en obras públicas (normalmente desacertadas) que así damos la apariencia de estar en actividad cuando en realidad la economía subvencionada es pan para hoy y hambre para mañana.
Cuando el PP decía que no se puede gastar más de lo que se ingresa por lo visto lo decían en broma, porque ahora no solamente siguen aumentando ese gasto deficitario sino que están superando las cifras de ZP. "Consejos vendo que para mí no tengo".
Para lo que se hace obra pública en España no es para mejorar infraestructuras sino para llevarse la astilla correspondiente y suficiente para garantizarse el indulto a través del conducto reglamentario de todos conocido.
Y la oposición todavía sigue sin propuestas, como cuando gobernaban ellos, y hablando de los cuarenta años de Franco para distraer a los imbéciles de lo que han hecho en los cuarenta años transcurridos desde que se acabó la dictadura. Las cosas en realidad no han cambiado desde entonces, excepto que la gente puede salir a la calle a protestar "porque se les reconoce el derecho al pataleo". La moraleja es la misma que escuchamos hace años, que cada país tiene lo que se merece.
Aún ejercen esta oposición insistiendo en que para soluconar la crisis hay que derrochar en gasto público que así creceremos. Y eso sabiendo que aunque se han subido los impuestos no se ingresa más. Sus fracasos han quedado en el olvido.
Y en el tiempo que ha pasado desde entonces la economía se ha estado hundiendo en lugar de crecer. Lo dicen los economistas, los profesores universitarios, los expertos en ciencias empresariales, y todo el que sabe cómo generar riqueza y cómo no.
También lo dicen los sindicatos que viven de repetirlo. Lo que tampoco se les oye decir es qué solución proponen, mientras tocan pitos y tambores en sus convocatorias festivas.
No se cumple ni se ha cumplido nunca el principio de progresividad de los impuestos, a ningún nivel: los que más impuestos pagan, en cifras totales, son los que menos ganan; y los que más ganan, consiguen pagar menos en proporción porque usan todo tipo de beneficios fiscales que al ciudadano de a pie no se le consienten.
La Unidad de Grandes Empresas de la Agencia Tributaria y la Comisión para la prevención del Blanqueo de Capitales usan distinto rasero con los poderosos que con los demás ciudadanos, a los que crujen con inspecciones por lo demás arbitrarias.
Ni las agencias del Gobierno, ni de las autonomías están haciendo otra cosa que tapar "los deslices" de los amigotes, porque aquí son los culpables quienes juzgan a los inocentes y los vigilantes quienes encubren los actos más odiosos y flagrantes.
Ahora mismo ni hay nadie en la cárcel ni de los unos ni de los otros por toda la corrupción que sigue habiendo. Cada día la prensa informa de los que entran o salen del Juzgado, y a veces de la penitenciaría, pero ninguno se queda dentro.
Ni lo veremos, porque los Magistrados son los encargados de gestionar el cambalache de indultos e intercambiando con los demás partidos los archivos de las causas penales, que la Justicia entierra con total tranquilidad con argumentos como "que no se veía nada raro".
En lugar de acabar con la corrupción están haciendo una exhibición escandalosa de encubrimiento que ofende a la inteligencia de cualquiera.
Luego que nadie se extrañe porque haya gente que no quiera seguir bajo gobiernos de embusteros que no es que no consigan lo que se proponen, sino que no pretenden cumplir lo que prometen.
Y aunque quisieran no sabrían hacerlo.
Menuda pandilla de figurantes, la que no cesa de interferir en nuestras vidas sin aportar nada al país.