GUZMAN1

sábado, 19 de noviembre de 2016

"Si el avariento fuera sol, nadie tendría luz ni calor."


Isidro Fainé, el amo de Gas Natural, ha ordenado suspender los cortes de suministro en el municipio de Reus, tras el fallecimiento de una mujer de 81 años que tenía que usar velas para alumbrarse por tener la luz cortada. La pobre mujer, impedida, no pudo escapar de un incendio en su casa provocado por una de las velas.

A buenas horas llega la orden, que además solamente está referida a Reus y no a toda Cataluña donde hay una ley de pobreza energética que prohíbe estas prácticas inhumanas. En otros países están mucho mejor protegidos por las leyes, que en España sirven sólo para postureo de los políticos. La legislación no se aplica o se aplica mal, sobre todo si los obligados a cumplirlas son las grandes compañías del Ibex-35.

Podemos ha pedido la comparecencia en el Congreso del presidente de Gas Natural Fenosa para que explique qué medidas han adoptado para la protección de las personas de especial vulnerabilidad. "Es gravísimo que en España, en la cuarta economía de la Zona euro haya gente que se muera por falta de energía", ha dicho Pablo Iglesias, quien también ha convocado concentraciones en las oficinas de Gas Natural de toda España para expresar su repulsa por estos hechos.

Qué vergüenza que sea sólo Podemos quien haya protestado ante esta indignidad, con los millones que ha ganado Fainé y su empresa. Y también gente de pocos escrúpulos como el ex-consejero Felipe González, que han marcado la política comercial de esta y otras empresas energéticas españolas.



No es el único escándalo de la empresa de gas y electricidad. El Gobierno colombiano ha decidido intervenir Electricaribe, filial de la compañía española Gas Natural Fenosa en el país, empresa a la que acusan de falta de inversiones y de mantenimiento de las infraestructuras, y que ha dejado de pagar a sus proveedores.

El gobierno de Juan Manuel Santos asume temporalmente la gestión de la compañía para asegurar el servicio a los clientes. Esta decisión se llevará a cabo por dos meses prorrogables, tras los cuales se determinará si la empresa se debe liquidar o si se continúa la intervención estatal.

La compañía española ha amenazado a las autoridades colombianas locales con cortar la corriente a dos millones y medio de clientes, igual que a la anciana de Reus.

En España, la Ley 24/2013 del Sector Eléctrico y el Real Decreto 1955/2000 regulan las actividades de transporte, distribución, comercialización, suministro y procedimientos de autorización de instalaciones de energía eléctrica.

De acuerdo con la Ley, a los consumidores pueden cerrarnos el suministro de energía eléctrica transcurridos al menos dos meses desde que se nos haya requerido de pago fehacientemente, siempre que no se haya hecho efectivo el pago de las facturas.

El requerimiento debe practicarse por cualquier medio que permita tener constancia de la recepción por la persona interesada o su representante, así como la fecha, la identidad y el contenido del mismo.

En el supuesto de rechazo de la notificación, se especificarán las circunstancias del intento de notificación y se tendrá por efectuado el trámite.

Una vez realizado el pago de lo adeudado por la persona consumidora al que se le ha suspendido el suministro, le será repuesto éste en el plazo de 24 horas.

Para proceder a la suspensión del suministro por impago, la comercializadora no podrá señalar como día para la interrupción un día festivo ni aquéllos que, por cualquier motivo, no exista servicio de atención a la clientela, ni en víspera de aquellos días en que se dé alguna de estas circunstancias.



Gas Natural Fenosa opera en Marruecos el gasoducto Magreb-Europa, que une los yacimientos argelinos con la red española de gasoductos. También desarrolla actividades de exploración de nueva reservas en aguas y tierras marroquíes, incluyendo como tales las del antiguo Sahara español. Los representantes saharauis han exigido siempre la celebración de un referéndum de autodeterminación tras la descolonización.

En 2.006 un representante del Gobierno virtual de la Republica Árabe Saharaui Democrática abrió un proceso de concesión de licencias para la exploración de hidrocarburos en el Sahara Occidental, que disputa con Marruecos. Los permisos fueron adjudicados mayoritariamente a empresas con sede en el Reino Unido, pese a que Marruecos no piensa reconocer estas decisiones que afectan a su soberanía y hace valer sus propias licencias a empresas extranjeras.

Como las relaciones internacionales a veces se tensan, y España tiene sus más y sus menos con Marruecos, podría llegar a darse un cierre del flujo de gas a través del gasoducto. No conviene entrometerse en el asunto saharaui si no queremos vernos como Ucrania, país al que Rusia cerró el suministro por impago y por el conflicto de Crimea.

Gas Natural Fenosa depende del gas magrebí para su millonario negocio. La alternativa para extraer gas natural del subsuelo es el denominado fracking, que presenta graves desventajas desde el punto de vista medioambiental. No obstante, en caso de que se produjera una interrupción del suministro, la empresa española creo que exploraría esa opción sin guiarse por otras razones que el beneficio.

Su actual presidente, el citado Fainé, hace lo mismo que su predecesor Salvador Gabarró: apretar a los inversores igual que a los consumidores, llevándose como directivos la intemerata que deducen de la cuenta de resultados.

Gabarró recibió 1,1 millones de euros el año 2015, la misma cantidad que el año anterior, mientras que el consejero delegado de la compañía, Rafael Villaseca, ganó 3,43 millones de euros. Por su parte, Felipe González recibió 46.000 euros el último año que ejerció de consejero de la compañía.

Cuando llamen a tu puerta para cambiarte de compañía suministradora, dile que sí al comercial para que se gane unos céntimos de todo lo que nos sacan. Hasta la vida.