GUZMAN1

jueves, 24 de febrero de 2022

" JUDAS", de Luis Muñoz Rivera.





Eras inquieto, altivo, belicoso,

batallador, resuelto;

a duda, el hondo mal de nuestro

siglo turbaba tu cerebro.


Se desbordaba en ímpetus rebeldes

tu carácter soberbio,

como del etna se desborda el cráter

en láminas de fuego.


De patrio ardor henchido, no tenía

tu corazón entero,

para el dolor latidos miserables,

ni fibras para el miedo.


Brillaba fulgurante en tus pupilas

la chispa del talento;

alma de tempestad, frente de apóstol

y músculos de hierro.


Y te vendiste... La calumnia infame

manchó tus labios trémulos;

fue un pobre resto de vergüenza ¡el último¡

a sacudir tus nervios;


lo que tienes del afrecha en la sangre

se sublevó violento;

todo lo que hubo en ti de grande

rodó con brusco estrépito


y en tu obra gozaron los verdugos;

y, de tu hazaña en premio,

a tus pies arrojaron la moneda;

a tu rostro el desprecio.


....


Si no apuraste ya, con firme pulso,

el pomo de veneno;

si respiras aún, traidor... ¿Qué hiciste

de los treinta dineros?